Nuestro huerto comienza a dar sus frutos: lechugas, romanescus, cebollas, habas, patatas. Los productos del huerto se utilizarán para que los alumnos elaboren recetas saludables en las prácticas de cocina.
Los cambios actuales en cuanto al cultivo y la distribución de alimentos pueden llevar al consumidor a una situación de vulnerabilidad y pérdida de autonomía en lo que respecta a su alimentación.
Con esta herramienta, además de aprovechar las instalaciones disponibles para mejorar la calidad educativa de nuestro centro y sensibilizar sobre las cuestiones medioambientales, trabajamos la posibilidad de acceder a alimentos sanos y sostenibles mediante la cultura del autoabastecimiento.